Es simple. Es una idea que no tiene explicación que no haya sido puesta en marcha antes. Es un buen proyecto. Soluciona problemas de diversa índole. Puede hacer que la tecnología esté al servicio de la gente y hacer la vida más sencilla. Pero tampoco era necesario semejante aparato publicitario para dar a conocer la decisión de instalar un sistema de tarjeta magnética única para todo el transporte público metropolitano.
Hasta las buenas decisiones más elementales deben ser tomadas de manera exagerada, sobreactuada e incluso apresuradamente? Cuando Rosario instaló un sistema de este tipo en sus líneas urbanas no recuerdo que haya estado el Gobernador de la Provincia de Santa Fe realizando un acto público. Fue una ordenanza, como debía ser, y se puso en marcha en los tiempos que un cambio tecnológico de esa magnitud necesita.
El anuncio oficial dice que en tres meses estará funcionando, es prácticamente imposible. ¿Por qué tomar ese riesgo de hacer un anuncio jugando con los plazos? Todo parece hacerse para los diarios y la tribuna, que en este caso no faltó a la cita.
He dicho que el “progresismo” está ausente de este tipo de proyectos. Este gobierno “progresista” anuncia poner en marcha una medida sensata. Fantástico. Pero ese apuro, tiene tanta apariencia electoral y esa necesidad de agitar íconos, en este caso bastante menores, como señalar que nada puede salir mal ya que el decreto es el 84, y el 84 es “Néstor” en la quiniela. Luego se supo que no es así, que fue un error de la Presidente, pero si así fuera, ¡qué “progresismo” cabalero o quinielero!.
Tengo desde hace casi 10 años la subtecard, jamás tuve un problema, jamás hice una cola, jamás me tuve que acordar de boletos, pagos o recargas. Es todo automático y transparente para el usuario. Por favor, ojalá le dediquen más de tres meses y que hagan las cosas bien. La sociedad no da para más bromas y chistes pre-electorales.
Destaco esta medida porque va en una dirección correcta. Es un paso ínfimo para mejorar el transporte público, pero es un paso. Más vale tarde que nunca.
Desde algunos críticos del gobierno hubo voces que señalaron el “lobby” de algunas empresas. Es como señalar que detrás del servicio de semáforos está el “lobby” de las empresas que venden semáforos, o que detrás de todo programa de equipamiento de hospitales están los “lobbys” de los que venden tomógrafos. Obvio. Las empresas que venden bienes o servicios hacen su propaganda e impulsan proyectos en donde se apliquen sus productos. No descubrieron nada. Lo que hay que mirar es la naturaleza de la medida, positiva a mi juicio, y su desarrollo. Allí se podrá evaluar la competencia de las autoridades para hacerlo y si los “lobbys” usan armas ilegales y de destrucción masiva de las arcas de los argentinos.
Quería escribir una nota “oficialista”, pero tampoco me salió del todo.
Cali
Yo no se porque no ponen al otro representante del Gobierno para hacer este tipo de anunció, lo mismo que los planea canjes de heladeras, lavarropas y calefones, sería el primer paso para elevar un poco el nivel de la figura presidencial, para eso hay funcionarios. Creo que de ese modo no se expone al cualquier presidente al discurir cosas que hacen que pierda autoridad.En un momento en que ni los medios ni la oposición tienen respeto por las figuras institucionales, se este de acuerdo o no, se este de la vereda de enfrente o no, es algo que debería cuidarse. Estaría bueno no exponer al la figura de presidente un riñas, cpnventillo ni anuncios mas propia de Lita de Lazari.
ResponderEliminarel mismo título, similar contenido y una foto parecida (solo incluyendo a Homero Simpson Boboloni) podrían usarse para informar sobre la reglamentación de la Ley de bosques.
ResponderEliminarEs cierto lo de la Ley de Bosques.
ResponderEliminarAunque el tema comentado (tarjeta magnética) tiene un agravante. Se trata de una cuestión que pueden utilizar electoralmente, cosa que sé que les quita el sueño, y además entra en el terreno de las cosas diarias que hacen a la vida de la gente que suponen dedicar su obra de gobierno.
Pedirles que tengan una visión de largo plazo, más allá de las próximas elecciones, como es el caso de la protección de los bosques, requiere tener una visión de país que en Argentina no existe desde hace años (décacas? más de un siglo?) y requiere también de un reconocimiento de las consecuencias no inmediatas de una medida de gobierno, o lo opuesto, las consecuencias de la no acción de gobierno.
En fin, es como exigir demasiado a quienes sólo miran las encuestas. ¿Se imaginan? ¿Cuándo se protegen los bosques? ¿Cuándo se puede traducir eso en un acto con escenario, bombos y barra?
La carencia dramática de la política argentina en relación al mediano y largo plazo ha generado que la Suprema Corte de Justicia tenga que fallar en contra del Estado por la inacción en relación al Riachuelo, o los desmontes en Salta.
En fin, me alegro con que saquen adelante la tarjeta magnética. Si es que lo hacen.
Para proteger los bosques, francamente, creo que todavía no hay suficiente Estado. Es decir, habrá que seguir demandando y exigiendo. Por ahora, es demasiado para este gobierno, y probablemente para quien le suceda.